Mejora la satisfacción de tus clientes y reduce su abandono.
Evalúa el conjunto de atributos, beneficios o valores que el consumidor vincula con tu marca.
Gestiona el compromiso de tus empleados y realiza sencillas evaluaciones 90 grados.
Realiza un seguimiento de las encuestas ligadas a tus normas de calidad ISO y EFQM.